viernes, 10 de junio de 2011

NO TODO ESTÁ PERDIDO

Por Nidia Arias

"Es importante cuidar la infancia, porque los niños son el futuro de nuestro planeta y muchas veces no nos acordamos de ello."
Los operativos de control efectuados por la Dirección Nacional de Policía Especializada en Niñas, Niños y Adolescencia, (DINAPEN) son considerados procedimientos apropiados y fructíferos para que  los niños, niñas y adolecentes no sean víctimas y caigan involucrados ya sea en el alcohol, droga o en pandillas, pero ¿Por qué si hay tantos operativos todavía hay niñ@s y adolescentes en discotecas y centros de diversión? O ¿tal vez no será hora de cambiar la cultura y mentalidad de cada uno de los involucrados directa o indirectamente?
Los operativos que realiza la Dinapen son para proteger a las víctimas que hayan caído tanto en el alcohol como en drogas, esto se hace con los jóvenes de menores  de 18 años, por lo cual se localiza a sus padres o parientes más cercanos para coordinar y trasladar a los infractores a un centro de rehabilitación de alcohólicos anónimos. ¿Llenado los supuestos centros de rehabilitación, que no son más que centros de perfeccionamiento delincuencial, se acabará con el problema?
Por lo tanto, da mucha pena, ya que muchos adolescentes buscan la forma de quitarse la vida y no tratan de buscar una solución, por lo tanto los señores de la DINAPEN, como seres humanos, deberían estar más pendientes para que los menores de edad no caigan en sitios de  diversión, ya que salen sin permiso de sus padres o salen con pretexto de que van a realizar algún trabajo en grupo. Además, los padres deben preocuparse por inculcar una cultura de respeto, saber a dónde van sus hijos y qué hacen.
Lo más importante es que se llegue a un acuerdo y que se prohíba totalmente la venta libre de bebidas alcohólicas a los jóvenes menores de edad, pues en muchas ocasiones se ha podido constatar que las tiendas no cumplen con las leyes establecidas.
Existen personas que utilizan especialmente a los niños o niñas para trabajar en minas, basureros, pidiendo caridad, vendiendo caramelos. Se han convertido en mafias y redes en la provincia de Cotopaxi, y hasta la actualidad la Policía no ha podido dar con la identidad de los abusadores. Deberían hacer un seguimiento riguroso para poder encontrarlos.
Todo niño o niña y adolecente tiene el derecho a ser libre, derecho a estudiar, derecho a ser escuchado, derechos, deberes y responsabilidades son medios para hacerlos efectivos, garantizarlos y protegerlos, conforme al principio del interés superior de la niñez y adolescencia y a la protección.
Para que los jóvenes no caigan en malos pasos, tanto padres como hijos deben comunicarse,  para saber a qué tipo de problemas nos podemos enfrentar, y tanto en escuelas como colegios deben realizar charlas, motivaciones para que de eso modo tengan una diferente forma de ver la vida y buscar una solución a los problemas.

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